Estoy sentada, escribiendo. Ceno cereales, ¿qué persona cena cereales? Pues yo.
Me gusta el chocolate. Es mi estimulante cuando me encuentro mal. Me gusta llorar. Me desahoga, me hace sentir mejor. Estos días han sido unos días de mierda. Han sido duros, amargos. Necesito un cambio radical, cambio de aires, de ambiente, de gente en mi entorno. Necesito salir, sentirme querida, apoyada. Rodeada de gente que sé que verdaderamente me quiere y saber que estarán ahí cuando lo necesite. Estos días han sido negros, como otros muchos de mi vida. Pero me prometo a mí misma que esto va a cambiar y que todo va a dar un vuelco. Odio el ambiente en el que estoy viviendo ahora mismo. Nadie comprende. Nadie entiende. Yo, siempre tengo que comprender y entender a los demás. Mientras tanto yo ser mala de la historia. Necesito expresar mi odio, mi rabia, el dolor que tengo adentro. Necesito irme lejos, contigo. Creo que no hay que poner impedimentos a nada. Voy creciendo y necesito ser libre. No soporto un NO. Tengo edad para cualquier cosa y más, aunque a veces sepa que soy inmadura. Yo también tengo sentimientos, aunque muchos crean que no, que soy dura, insensible y cabrona. Tengo escrúpulos. Las personas que no tienen escrúpulos no lloran. Yo lloro.
Espero que todo salga bien. Sólo quiero ser feliz. Lo necesito.
Paranoias abstractas.
Y lo serás, mientras tanto preocupate de tí misma, de hacer lo que te gusta, cosas con las que disfrutes... y lo demás vendrá solo.
ResponderEliminarUn saludo.